Piedra a sotavento
Tal vez...!
Bendita voluntad.
Piedras ígneas.
Invierno sacrílego.
Un aprendizaje llamado José...
. La vida no es sencilla, nadie hasta ahora me ha dicho lo contrario,
¡ nadie...!
pero me pregunto que puede hacer una mujer que ama,
cuando la sencillez de la vida la abruma al grado
de dejar constancia de ello en pequeñas letras.
En el post anterior, me quede pensando, porque si se es a veces tan real,
la contestación no puede ser igual de real.
¡ Es curioso como puede influir la vida del ser humano, en la nuestra propia!
Ese post, con nombre y bajo significado concreto,
tomó forma espeluznante.
No he sido yo la mujer, pero José existe,
es un hombre conciente de su poder, de la belleza de su cuerpo,
y de lo que puede formar y entregar con su estupidez.
Sabe que se le ama, y que la vida es justa a partes iguales,
si así se mira la realidad.
¡Pero se puede ser tan perro, para destruir el amor con un rechazo!
No sé, la vida a veces da muchas vueltas y nos enseña emociones sin sentido,
pero sentidas hasta los huesos mismos.
¡Me pregunto que sintió José de que su mujer le dijesé
" Te deseo José, ven...!
que palabras de terror le despertó,
que tuvo la necesidad sin justificación
de bofetear el rostro de su amada,
amándola y retándola a ser ella misma.
¿ Me pregunto que tantos José existen en el mundo que siendo tan tiernos,
golpean con tanta crudeza y con tanta fuerza su pasado.?
¡Aquí no hubo golpes, no fueron ni existieron! pero como calaron...
Me pregunto que tanto teme el hombre, cuando se le dicen verdades
y hasta donde puede llegar un mal recuerdo.
No justifico las acciones, no piensen eso,
simplemente me quede pensando
cuantos José no van por el mundo amando,
y luego destruyendo su propia valía con una reacción tan irreal,
como es el rechazo a un deseo de su propia mujer.
¡No, no fuí yo, lo reitero, es una idea que se me vino a la mente!
cuando mi niña me preguntó, porque a la mujer decía le dolía la cabeza
cuando su pareja quería hacerle el amor.
¡Una pregunta inquietante viniendo de una jovencita de 12 años!
a la que se le ha enseñado a preguntar sus inquietudes,
a leer y aprender por si misma
las reacciones de los hombres desde los libros.
Hay que enseñarles cuestiones de lógica, bajo la lógica de la palabra,
me doy cuenta de ello, a veces temo equivocarme,
pero no puedo negar que mis hijas están creciendo,
y aprendiendo a defenderse por si mismas como mujeres y seres humanos.
Lógico que la respuesta es,
que tuvimos que charlar de nuevo, de los temas que le atañen,
no solo como mujer, ni como estudiante,
sino como ser humano.
Su última cabilación de ese día,
fueron la infinidad de respuestas que se pueden tener
a una definición de mujer con la libertad de expresión en la piel,
en la acción y en la palabra.
Eso justamente me llevo a recrear a José...
y a preguntarme que golpes de pecho tengo que darme contra la pared,
para instruir a mis hijas de la mejor forma posible.
¡Hoy me gustaría decir que los José no existen,
pero desafortunadamente los hay!
hay quienes en este siglo siguen golpeando a la mujer,
no solo a golpes de cuerpo sino de alma.
Y seguramente la única lección válida para ellos y para mis propias hijas
es no permitirles la regresión en el tiempo, a la época cavernaria.
¡Ser una mujer no basta, hay que hacerlo valer...!
¡ Así como hacer valer el derecho de los hombres a ser reales sin ocultarse!
pero no permitiéndoles formarse los José, de este post anterior.
La realidad es cruel, pero mis hijas tienen que aprenderlo
y creo que yo también.
¿ Y tú que piensas...?
Daan
Callando un nombre.
¡ Callo, no digo más, mi cuerpo y mi lengua ha muerto.!
ya son muchas las horas que despierta busco mi conciencia,
¡ no está a mi lado...! le has sin duda deshecho.
¡ Se ha vuelto en segundos en fina arena del tiempo...!
y yo, yo vivo sobre ella, esperando tu alivio y mi regreso.
¡ Tan siquiera supiera tu nombre, tan siquiera pudiera decirlo!
pero ya vez, yo guardo a conciencia lo que aún no es tan mío.
¡ Bendito seas, me enseñaste otro camino, !
la perdición de mi alma ya no será mi destino
ahora sé que ame, con todo lo que yo he aprendido
y del aprender se dió, este sonreirle al cristo.
¡ Bendito seas señor, hoy sé que me has bendecido...!
me sacaste de las sombras, del silencio, del olvido,
hoy solo vivo sonriendo, como me enseño el cariño.
¡ Callo, no digo más, mi cuerpo va caminando,!
le llevan a sepultar, porque se volvió misterio.
No te aflijas ya por mi, es música la que voy oyendo,
me enseñaste al fin a amar, aunque se murió mi trino
hoy día, no se cantar, pero se rezarte dos misterios,
uno es por enseñarme a amar, el otro por podar caminos.
¡Hoy bendigo a ti la gracia, de volver cama mi cuna!
que de niña a mujer fuí, bendecida como ninguna,
aunque en las sombras me duerma,
como aquella que le nombran luna.
¡ No te apures callo ya, me guardo en silencio mis pensares..!
sólo quería frotar de nuevo tu nombre en mis arrabales,
y pintar de tono azul una mariposa negra
que te diga que te ame, como te amo de a futuro,
porque de futuro soís, la bendición de mi rostro.
¡ Callo amor, callo ya, sólo quería, bendecir tu nombre...
Daanroo
Locuras de un andar.
¡ Puertas, caminos, distancias... efectos de dos...!
alegrías infinitas e infinito mismo de soledad,
así son las circunstancias de un pie al andar,
por efectos distancias, por distancias soledad.
¡Imposible cambiar la sincronización de los tiempos...!
Unas veces se paga, otra por cobrar se da,
pero a efecto y por afecto siempre brota la verdad.
¡ Distancias a diestra, y diestra en la distancias!
la sonrisa perdura, en la emoción de ubicuidad.
me ufano de ser humano y humano me sé sin par,
pero a efecto de sonrisas, me muero y vivo y siempre sin parar.
¡ Puertas, caminos, distancias que locuras me hacen recordar...!
Daanroo
¡ De aquella pregunta tuya....!
¿ Hoy me preguntaste si pensaba en ti, si te recuerdo....? ¿ si en mis sueños de locura, recuerdo esa noche en que me entregue a ti confiadamente...?
Hoy te digo que si, que recuerdo el sentir de tus manos recorrer mi vientre, la dulzura de tu lengua subir y bajar por mi garganta recogiendo la melaza que escurría sobre mi; que recuerdo la nostalgia de tus ojos al tratar de alcanzar mi punto muerto para volverle a dar vida, desde tu propia distancia.
Hoy te digo, que la vida se deja fluir cuando el recuerdo prosigue a capa y espada la memoria de la mujer, que el sentimiento de amar no se termina cuando termina el resultado de saber al hombre sobre si; que la vida consigue de pronto revolcar al hombre sobre si mismo y deja a la mujer estancada en el paso del tiempo sin detenerse a pensar que se ha grabado un instante en su memoria, en su sentir y en su pensar, a pesar de delimitarse encarecidamente con que una relación a flor de paso y cortada al amanecer, no es más que una estrella fugaz que ha descendido del cielo para contemplar las hojas caidas del árbol.
Pasar la memoria por la palabra mentira, es negarse a uno misma, que la delicia de entregarse al hombre, no existió, y negarse a si misma, es reprochar a la vida y a Dios, y pesnar que la naturaleza del hombre por retener la mirada del ser que ama, es una simplonada.
No, cariño, no puedo negar que aún te ama mi cuerpo y mi mente, aún cuando vives lejos; que mi corazón sangra porque no aprendí a detener las hemorragias que al amarte me cause yo misma; que aún recuerdo que la simplicidad de tu cuerpo y mi cuerpo dieron fruto, ese fruto perfecto que crece inmisericorde entre mi mente y mi alma, aún sin escapar.
Que recuerdo la constancia de tus manos al entrar en mi cuerpo, la sonrisa misteriosa que broto de ti, al hacerme tuya y tu respirar furtivo al escapar en las primeras auroras de la madrugada, aunque el reloj de la pared, marcara las ocho de la noche.
No puedo olvidar que fui tuya y que me perteneciste, que mis manos recorrieron tu cuerpo, y tu cuerpo recorrió mis manos, entregandose con vida propia a mis sentimientos, aunque tu corazón no estuviera conmigo.
¡Qué recuerdo tu sexo dentro de mi sexo, tu mano, tomando mi mano; tu boca, en mi boca, tu aliento, en mi aliento....! que recuerdo sin lugar a dudas, los sonidos silenciosos que salían de tu vientre y el mío, al estampar en un chasquido la saledad de nuestros cuerpos.!
¡ Te recuerdo, te lo digo, y lo sostengo ante tus ojos si así quieres saberlo...! lo que me inquieta ahora es saber amor, ¿Por qué te inquieta tanto mi respuesta...?¿ Por qué hoy después de tanto tiempo, recordaste que una vez en tus brazos fui tan tuya, y tan mujer....?
Daanroo
¡ Porqué no...!
¡ Porqué no...!siempre es tiempo de poner las manos en ruego...
hoy me toca pedir por el amor...
por la sanidad del cuerpo..
por la fe del alma...
por la paz...
por ti
por mi...
¡ ¿ Porqué no..: ?!
Hoy como ayer...
poner las manos en señal de rezo...
es la simplificación de la existencia misma...
la pureza de la dicha...
en encuentro contigo mismo...
¿ Porqué no..?
Daanroo
Gracias -Al Gran por vuestras manos.